domingo

Carta a mi amigo*

Sabes muy bien que ni tú me consideras tu amiga, ni yo te considero un amigo. Tú sabes un par de cosas sobre mí, dichas voluntariamente a falta de alguien con quién hablar; y yo sé un par de cosas sobre ti, dichas involuntariamente, porque, de hecho, tú no me las dijiste, sino que alguien más lo hizo -y vaya sorpresa fue cuando me enteré que hablaban de ti-. En fin, me dijiste "¿qué clase de forma de empezar es esa?", pues es extraña, como yo, pero la última persona importante que conocí me quitó la última esperanza de vivir en paz, feliz y dentro de esa burbuja pequeñita, pequeñita, como yo -aunque, en realidad, me quitó muchas cosas, pero esa es la más relevante-; así que he aprendido a diferenciar a personas que piensan con la cabeza de las que no lo hacen, o como te dije, de las que piensan con el corazón o con el miembro viril. Por eso, tú vas a ser mi amigo de ahora en adelante, porque no tienes sentimientos y te vale madre lo que te digan, pero sabes escuchar, y como somos nuevos amigos, no te aburriré desde el momento que abra la boca, puede que después, pero no desde el comienzo. Y después de haberme escuchado no espero que me digas que hacer, sino que me des un puñete. Yo sé qué tengo que hacer, pero necesito que alguien más me lo diga, porque yo sola no funciono, nunca he funcionado sola y eso me da pena. Later, later, te daré un cigarro y quizás un pedazo de torta de chocolate, como siempre. Habla'os.
PS: Espero que esto funcione y doy gracias que no lo leerás.
*Perdón por el pobre título, este fin de semana apesta.

jueves

Chiste interno

- ¿Tú conoces a ELLA?
- No.
- ELLA pues, una que le dicen arquitectura moche.
- ¿Arquitectura moche? ¿Por qué?
- Porque es plana y chata.



*Te adoro, mujer, lo sabes =p

sábado

3.

Por qué no me habla?